viernes, 5 de abril de 2013

LA ABSTENCIÓN




La abstención consiste en la opción que tiene todo ciudadano para no pronunciarse en favor o en contra en la resolución de un asunto, es un derecho legal que no deja de dar un mensaje a quien promueve la votación; puede ser legal pero no siempre justificada, también en ocasiones es una señal de apatía y desdén que equivale a otorgar un cheque en blanco a alguien que puede dar mal uso de él, falta de conciencia y demostración de la falta de interés en los asuntos que tarde o temprano tendrán repercusión colectiva, aún en aquellos que  optaron por ella, cuando  las decisiones tomadas al paso del tiempo o por sus consecuencias inmediatas, resultan no ser las correctas con seguridad vendrán las quejas de los que en un inicio no estuvieron de acuerdo, pero ¿con que autoridad moral pueden reclamar quienes en su momento renunciaron a participar en la toma de decisiones? Muchos nos quejamos de la forma en que el gobierno maneja los asuntos nacionales, pero como ciudadanos poco hacemos para influir o participar en los órganos que toman las decisiones, pues es mucho más cómodo dejar que otros lo hagan; y claro los más dispuestos a hacerlo son aquellos que viven de la política y que no son precisamente los más honrados, ni los más trabajadores ni mucho menos los más responsables, si eso sucede a nivel nacional, se explica porque sucede en organizaciones como la nuestra donde también abundan los vividores y tramposos gente que ha podido llegar a puestos de poder para únicamente sacar beneficios personales, pero no se les puede culpar de todo a ellos pues únicamente hacen lo que saben hacer; lacras siempre han existido, pero no siempre han tenido una abstención que trabaje pare ellos; para que estas lacras prosperen, es indispensable la indolencia, la indiferencia y la apatía de otros, que los hace involuntariamente cómplices.

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